Desde hace dos años que el Centro de Estudios Marinos CEM y su socio Rare, introdujeron los clubes de ahorro como una alternativa para darle un uso inteligente a los fondos de las comunidades pesqueras. En este corto tiempo, la metodología ha llegado a cientos de pescadores hondureños que han compartido sus vivencias hasta los lugares más remotos del país.

El CEM realizó una gira por el norte del país en la que comprobó que los miembros de los clubes de ahorro se encuentran muy satisfechos de haber aprendido las técnicas de ahorro que les permite estar preparados para los tiempos difíciles. Recogimos las experiencias y testimonios de los y las pescador@s y directiv@s de los clubes que representan un mecanismo de resiliencia financiera.

En las comunidades pesqueras donde el sonido del mar es la música diaria que escuchan los pobladores, es muy frecuente ver las reuniones públicas en los centros comunales. Una vez por semana, los clubes de ahorro sesionan y establecen nuevos planes para el futuro. Cuando se abren las cajas de ahorro, es cuando comienzan en palparse los frutos de la esperanza.

Luz en la oscuridad

Adonis Bernárdez, el presidente del club de ahorro “Nueva Luz” de la comunidad de Cusuna, Iriona, explicó que “ahora los compañeros no tienen que buscar a quien pedirle prestado, ellos pueden optar a un préstamo con nosotros que equivale a tres veces la cantidad que ellos llevan invertido y solamente a una tasa del 10% de interés”.

Bernárdez asegura que en el club Nueva Luz tienen una regla y es que durante el año solamente prestan dinero para gastos fúnebres, medicamentos o para compra de alimentos. También recalcó que una de las actividades que hacen todas las semanas es la venta de ropa usada americana, esto les deja ganancias que los fortalece como club. “También estamos planeando la venta de hamburguesas para incrementar nuestros ingresos” finalizó Adonis. Hasta el momento, el club de ahorro Nueva Luz tiene un fondo que supera los 12 mil lempiras.

Nueva Luz ha crecido hasta el punto de convertirse en una empresa de producción de alimentos. Juvencio Suazo nos reveló que “nosotros producimos todo lo que es derivados de la yuca, almidón, casabe y  marote. Tenemos un club de ahorro que hace poco formamos pero va bien encaminado”.

La visión de Nueva Luz es convertirse en una de las empresas de producción más grandes del municipio de Iriona. Actualmente cuentan con una pulpería donde los pobladores suelen comprar granos básicos y otros insumos. También, la organización obtuvo la posibilidad de obtener máquinas de coser para que sus miembros puedan aprender el oficio de la costura.

El próximo objetivo del club de ahorro Nueva Luz es buscar apoyo por medio del CEM y Rare, para equipar un centro de acopio para el procesamiento del pescado, lo que les permitirá que exista una mayor generación de empleos.

Un hábito que genera ganancias

Marta Ramírez, una residente de Cocalito, Iriona nos contó su experiencia dentro de los clubes de ahorro. “Tenemos un club formado por 25 mujeres. Nunca había tenido una experiencia tan grande como esta. Ahora ya no gasto lo poco que consigo diariamente, lo ahorro para el beneficio de mis hijos” dijo. Ramírez aseguró que muchos en su comunidad se animaron a realizar el hábito de ahorrar ya que Cocalito es casi un pueblo olvidado de Honduras, es por eso que formaron los clubes Abiniruni (Bendición) y “Dios con Nosotras”. “Nosotros realizamos subastas y rifas para poder recaudar fondos. El ahorro sirve para todo, en diciembre cuando clausuramos nuestras actividades ese dinero lo utilizamos para la canasta básica”.

Cada miembro debe ahorrar 100 lempiras a la semana y apartar 5 lempiras más para el fondo social. Marta expresó que “ya hemos hecho uso del fondo social para beneficio de la comunidad o cuando a una compañera se le muere un familiar se le da un aporte económico” dijo Sofía Bulnes la presidenta del club de ahorro quien nos confesó que ya tienen acumulados 106 mil lempiras.

Cocalito también cuenta con un club de ahorro llamado “Mis abuelos” que está conformado sólo por adultos mayores. Una vez a la semana los ancianos registran sus ahorros y sacan préstamos si lo necesitan. Muchos de ellos piensan en el futuro y ahorran para no dejarle deudas a sus familiares cuando les toque partir. Es por eso que es muy natural observar que en las iglesias o centros comunales, algunos adultos mayores ya tienen pagados sus ataúdes. Doña Angelina Velásquez una miembro del club Mis Abuelos confesó que “tenemos cerca de 25 miembros y hacemos actividades todos los domingos”.

Generando expectativas

Plan Grande en el municipio de Santa Fe, Colón  ha sabido aprovechar la experiencia de los clubes de ahorro y los miembros de la comunidad están pensando en abrir un nuevo club conformado solamente por pescadores jóvenes. Edgardo Padilla es facilitador de los clubes de ahorro y un gran apoyo para el CEM, él ha visto el entusiasmo que existe en las personas por formar parte de un club de ahorro. “Hemos logrado en estas comunidades costeras de Santa Fe, Plan Grande, Manatí, Quinito, Punta Frijol poder armar seis clubes de ahorro, la gente sigue preguntándose si hay posibilidad de entrar a uno porque estamos muy lejos de los sistemas bancarios” manifestó Padilla.

Edgardo Padilla también aseguró que esas personas interesadas le comentan que en otras ocasiones habían tenido la oportunidad de ahorrar en cooperativas, pero que no se sentían tan seguros como lo están ahora. “Ellos saben que al final los ahorros van a estar ahí para el día que toquen repartirse. Al final del ciclo los miembros saben que van a recoger su ahorro, es algo que antes no se podía hacer en las casas”. Las comunidades pesqueras que visita Edgardo, utilizan sus ahorros para cubrir sus necesidades básicas. “Estas familias piensan en los niños cuando comienzan las clases, también piensan comprar algún aparato básico a fin de año o para obtener material para la pesca”.

La disciplina sigue siendo uno de los pilares más importantes dentro de los clubes de ahorro. Para que las personas lleven al día sus finanzas, es preciso que exista un compromiso de todos. En las reuniones de los clubes de ahorro existen multas económicas por faltar a las reuniones sin previo aviso, por llegar tarde, hablar sin pedir la palabra, por contestar el teléfono celular sin autorización y hasta por salir de las reuniones sin excusarse.

Ahorrar te permite soñar y trazarte metas. Esa inversión que hacen los pescadores semanalmente se transforma en un fuerte capital que rinde frutos en un determinado tiempo.  Carmen Pérez la tesorera del club de ahorro “La Esperanza” de Cocalito, aseguró que “al principio ahorrábamos con gente de nuestra etnia garífuna pero no funcionó. Ahora gracias a Dios que estamos en el club de ahorro. Tenemos una gran amistad y entendimiento, es maravilloso”. Pérez agregó que “por ahora tengo guardado mi dinero pero en el fututo quisiera arreglar el piso de mi casa.  El club nos ha ayudado en la crisis”.

Para el 2021 se viene más capacitación para las comunidades pesqueras del país. El CEM y Rare trabajarán de la mano para que los pescadores del país aprendan la importancia de ahorrar y los beneficios que trae reservar ese pequeño fondo para un futuro mejor.

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